Cardiomiopatía hipertrófica felina

Miocardiopatía hipertrófica felina | Clínica veterinaria
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Miocardiopatía hipertrófica en el gato: una enfermedad furtiva

La miocardiopatía hipertrófica(MCH) es una enfermedad cardiaca hereditaria caracterizada por un engrosamiento anormal(hipertrofia) del corazón del gato, sobre todo del ventrículo izquierdo.

La hipertrofia afecta a la capacidad del corazón para bombear sangre eficazmente.

Así, el resultado es una reducción de la cavidad ventricular, lo que se traduce en un aumento de la presión arterial.

Este aumento de la presión puede hacer que el flujo sanguíneo llegue a los pulmones, provocando congestión pulmonar e insuficiencia cardiaca.

Se conocen tres formas de hipertrofia miocárdica felina

  • Se extiende simétricamente a toda la pared ventricular
  • Asimétricacon localización predominante en la pared posterior del ventrículo izquierdo
  • Segmentariaes decir, limitado a segmentos individuales del miocardio ventricular

La manifestación de la miocardiopatía hipertrófica en los gatos puede variar significativamente de un individuo a otro.

De hecho, muchos gatos con corazón hipertrófico permanecen asintomáticos durante largos periodos, mientras que otros pueden desarrollar signos clínicos más evidentes.

Ciertas razas felinas están predispuestas a la miocardiopatía hipertrófica

La incidencia de esta enfermedad es considerable en determinadas razas felinas:

– Maine Coon
– Ragdoll
– Británico de pelo corto
– Americano de pelo corto

En los Maine Coons y Ragdolls, se ha identificado una mutación en el gen MYBPC3 responsable de la enfermedad.

Pero la prevalencia también es alta en otras razas, como el Británico de Pelo Corto, el Gato de los Bosques de Noruega, el Pliegue Escocés, el Sphynx, el Persa, el Siberiano, el Bengalí y el Rex.

Es más evidente en gatos de entre 3 y 7 años, pero también puede darse en ejemplares más jóvenes o mayores

Síntomas de la miocardiopatía hipertrófica felina

Los síntomas de la miocardiopatía hipertrófica pueden ser sutiles y, en algunos casos, no manifestarse hasta fases avanzadas de la enfermedad.

Algunos de los signos clínicos más frecuentes son

– Dificultad para respirar o tos
– Disminución de la actividad, falta general de interés por las actividades cotidianas o fatiga durante el juego o la actividad física.
– Disminución del apetito
– En algunos casos, la presencia de líquido en los pulmones puede provocar episodios de vómitos.
– Los desmayos o colapsos pueden producirse repentinamente y son consecuencia de arritmias cardiacas.

En presencia de uno o varios de estos síntomas, es esencial consultar a tu veterinario de confianza.

Diagnóstico: un enfoque multidisciplinar

El diagnóstico de la miocardiopatía hipertrófica en gatos requiere un enfoque multidisciplinar que utilice distintas técnicas diagnósticas para diferenciar la miocardiopatía hipertrófica de otras afecciones cardiacas.

Al principio, el veterinario realizará una anamnesis completa y una exploración clínica detallada.

Entre las herramientas de diagnóstico más utilizadas están:

Ecocardiograma: para visualizar directamente el grosor del músculo cardiaco y su funcionalidad
Radiografía de tórax: para evaluar los signos de congestión pulmonar y agrandamiento cardiaco
Electrocardiograma (ECG): para identificar posibles arritmias cardiacas asociadas a una cardiomiopatía
Análisis de sangre: para descartar otras enfermedades que puedan afectar a la salud cardiaca del gato

Es importante hacer un diagnóstico precoz, ya que esto puede permitir una intervención terapéutica temprana.

Terapia y tratamiento

El tratamiento de la miocardiopatía hipertrófica en gatos tiene como objetivo controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.

Actualmente no existe una cura definitiva para la MCH, pero hay varias opciones de tratamiento disponibles.

Las estrategias terapéuticas incluyen fármacos que reducen la presión en los ventrículos y mejoran la función cardiaca.

Los gatos con MCH deben ser controlados regularmente por el veterinario para evaluar cualquier progreso o cambio en la enfermedad.

Modificaciones del estilo de vida en el gato con MCH

Además del tratamiento farmacológico, deben combinarse medidas para reducir el estrés y limitar el ejercicio intenso en los gatos, a fin de prevenir posibles complicaciones.

Una dieta equilibrada y rica en nutrientes esenciales también puede contribuir a la salud general del gatito.

Para que revisen a tu gato y para revisiones periódicas, ponte en contacto con los médicos veterinarios de nuestra plantilla, que están siempre a tu disposición.

Además, le recordamos que la Clínica La Veterinaria está siempre abierta las 24 horas del día, incluidos festivos, y dispone de un servicio de urgencias de 20:00 a 8:00 horas.

Por la alegría de verlos FELICES

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