El gato abisinio: elegante y sinuoso, se mueve de puntillas
El gato abisinio fue reconocido oficialmente en 1882 en Gran Bretaña y se elaboró un primer estándar en 1929. Sin embargo, un primer ejemplar abisinio hizo su aparición en Londres en 1868, en una exposición felina. Zula, que así se llamaba, llegó a Londres en compañía del capitán Leonard Barrett a su regreso de la expedición británica a Abisinia (actual Etiopía) al final de la guerra. El origen del nombre Abisinio no depende tanto de que Abisinia sea el lugar de origen real de esta raza como de que Zula proceda de allí. Estudios genéticos recientes demostrarían que el origen más convincente de la raza abisinia es la costa del océano Índico y partes del sudeste asiático. Otras razas que se cree que contribuyeron al origen del abisinio son el siamés, el birmano y el azul ruso.
Elegante y regia, cuello arqueado y ojos almendrados
El abisinio se parece a las representaciones y esculturas de antiguos gatos egipcios, que muestran a un felino esbelto y flexible, con cuello arqueado, orejas grandes y ojos almendrados, verdes o dorados, bordeados de negro. Una de sus peculiaridades es que tiene un pequeño hoyuelo en la cabeza triangular. Con un aspecto que recuerda al Felis Lybica, el gato salvaje africano antepasado de todos los gatos domésticos, el abisinio tiene patas pequeñas y parece caminar de puntillas. Regio y elegante, el abisinio es un gato con una musculatura desarrollada, pero que sigue siendo armonioso y bien proporcionado.
El pelaje del gato abisinio: ticking y colores
El pelo de la El gato abisinio, suave, grueso y brillante, tiene una peculiaridad llamada«ticking «, que consiste en la alternancia de bandas claras y oscuras sobre una base de color:
- Marrón anaranjado (Liebre)
- Rojo cobrizo (Alazán)
- Gris intenso (Azul)
- Beige rosado (Leonado)
- Blanco plateado
También hay gatos abisinios de pelo largo: es una variante de la raza y se conocen como «somalíes». Nada más nacer, el Abisinio suele tener un pelaje oscuro que se aclara con la edad.
Un gato inteligente, vivaz, dinámico, sociable y cariñoso
Grandes saltadores, a los abisinios les encanta jugar, saltar, trepar y explorar. Su curiosidad es prácticamente inagotable y les encanta interactuar con los humanos en sesiones de juego que pueden durar horas. Cariñosos y sociables, les encanta interactuar con sus humanos, a los que dan alegremente cabezazos, lametones y abrazos. En resumen, el abisinio no es precisamente un gato de sofá tranquilo y dormilón, ni mucho menos. Lo ideal es que acojas en casa a una pareja de abisinios para que puedan jugar y divertirse mucho juntos.
Las enfermedades más frecuentes en la raza
Los abisinios pueden desarrollar anemia y también se ha detectado atrofia progresiva de retina (APR) entre ejemplares de esta raza, que puede causar ceguera con el tiempo. También son propensos a la luxación de rótula y a la displasia de cadera.
La alimentación de un gato abisinio
Para garantizar una vida sana y longeva a estos felinos, es esencial prestar especial atención a su dieta. El abisinio necesita comidas completas, nutritivas y bien equilibradas. Como gato que siempre está en movimiento, es importante elegir una dieta rica en proteínas que pueda soportar su nivel de actividad. Es muy recomendable el consejo de un nutricionista especializado. Si deseas obtener un plan dietético que tenga en cuenta las necesidades nutricionales de tu abisinio en función de su edad, nivel de actividad y estado de salud, puedes consultar a los nutricionistas veterinarios de nuestra plantilla.
Y de nuevo, si quieres someter a tu gato abisinio a una revisión o a un chequeo periódico, ponte en contacto con los médicos veterinarios de nuestra plantilla, que están siempre a tu disposición.
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