El gato birmano: ojos almendrados y cara expresiva
El gato birmano es una raza felina desarrollada a partir de gatos domésticos en el sudeste asiático, sobre todo en la región de Birmania (actual Myanmar).
Los primeros birmanos se introdujeron en Estados Unidos en la década de 1930 mediante la importación de un gato llamado «Wong Mau», considerado el progenitor de la raza moderna.
El encanto único de Wong Mau atrajo la atención del Dr. Thompson, criador de gatos siameses, que al principio la confundió con una siamesa por el color de su pelaje, descrito como marrón nuez, con puntas marrón más oscuro.
De la antigua Suphalak a la actual Birmania
En realidad, los primeros avistamientos de un gato marrón oscuro se remontan al siglo XVIII, cuando varios documentos escritos hablan de los gatos Suphalak (o Thon Daeg), que son probablemente los antepasados de los birmanos.
Thompson cruzó a la gata con un siamés: nacieron tanto siameses puros como híbridos siamés-birmano.
Después se aparearon entre sí, generando así la raza birmana pura.
En 1936, la Cat Fanciers’ Association (CFA) reconoció esta raza, a la que siguieron otras organizaciones como el Governing Council of the Cat Fancy (GCCF) y la Fédération Internationale Féline (FIFe).
El pelaje del gato birmano es una de sus características más distintivas
Este gato es conocido por su pelaje corto, espeso y brillante, que suele ser de varios colores, como marrón, azul, sable, chocolate, rojo y crema.
El pelaje es sedoso y suave al tacto y le da un aspecto elegante y atractivo.
La coloración de los gatos birmanos es única, ya que sus colores son intensos y uniformes, sin manchas ni rayas.
Además, su piel puede tener un tinte ligeramente más claro en el vientre.
El gato birmano es de tamaño pequeño a mediano: las hembras pesan unos 4 kg, los machos pueden alcanzar los 6 kg.
El carácter del birmano es uno de los aspectos más apreciados por los amantes de la raza
Estos gatos son conocidos por ser sociables, cariñosos y muy apegados a sus humanos.
Extremadamente juguetones y curiosos, les encanta relacionarse con la gente y participar en actividades familiares.
Además, los gatos birmanos son muy vocales y también suelen comunicarse activamente a través de sus expresiones faciales.
También se caracterizan por una personalidad intrépida y una gran inteligencia.
Estadísticamente, es una de las razas de gatos más longevas: por término medio, los birmanos viven unos 17 años.
Sin embargo, están predispuestos a ciertas enfermedades.
Las enfermedades más frecuentes en los birmanos
Entre las enfermedades más comunes están los trastornos respiratorios, como la bronquitis crónica, los problemas dentales y las malformaciones cardiacas.
Algunos estudios sugieren que los gatos birmanos pueden ser más propensos a enfermedades como la hiperlipidemia y la miocardiopatía hipertrófica, enfermedad en la que el músculo cardiaco se vuelve anormalmente grueso.
Las revisiones periódicas y una dieta equilibrada son esenciales para mantener sano al birmano.
Es importante conocer las posibles enfermedades asociadas a esta raza para garantizar un cuidado adecuado y mantener su bienestar.
Para someter a tu gato birmano a revisiones periódicas y vacunaciones, ponte en contacto con los médicos veterinarios de nuestra plantilla, que están siempre a tu disposición.
Además, le recordamos que la Clínica La Veterinaria está siempre abierta las 24 horas del día, incluidos festivos, y dispone de un servicio de urgencias de 20:00 a 8:00 horas.
