¿Y SI LE DIJERA QUE LA ESTERILIZACIÓN DE SU GATA LES GARANTIZARÁ A USTED Y A ELLA UN SUEÑO TRANQUILO Y DICHOSO?
Castrar a un gato es una elección que tiene ventajas médicas y de comportamiento y protege su salud.
Si su gata tiene entre 5 y 9 meses y de repente ha empezado a maullar y vocalizar durante el día y la noche (para disgusto de su descanso), a levantar la grupa, a frotarse por todas partes y a revolcarse sin cesar… pues sí: está en celo.
El ciclo reproductivo de cada gata se caracteriza por la poliestralidad, es decir, la manifestación de varios ciclos estrales que se suceden de forma regular de febrero a octubre.
Esto se debe a que la gata tiene un ciclo de ovulación inducido, es decir, su ovulación se desencadena con el acto sexual.
Por lo tanto, desde el momento en que comienzan los primeros “calores”, si no van seguidos del apareamiento con el macho, los ovarios permanecen perpetuamente o casi perpetuamente en una fase preovulatoria activa.
TANTOS CALORES, TANTAS HORMONAS. TANTAS HORMONAS, TANTOS RIESGOS.
La consecuencia directa de tanto calor es un “bombardeo hormonal” que afecta principalmente al útero, los senos y la médula ósea, además de a todos los demás tejidos y órganos.
Esta producción continua de hormonas puede provocar enfermedades graves.
- inflamaciones
- degeneración y tumores uterinos y mamarios
- anemias
- diabetes
- daño hepático
Recuerde que la esterilización debe acordarse siempre con su veterinario: consultarle le ayudará a tomar una decisión informada para proteger la salud y el bienestar de su gato.
EL CICLO ESTRAL DE LA GATA
El ciclo estral consta de cinco fases: proestro, estro, diestro y anestro.
Proestro: es la primera fase del ciclo y es cuando la gata atrae al macho a pesar de no estar sexualmente receptiva. Coincide con el crecimiento de los folículos y el aumento de estrógenos circulantes.
Celo: es la fase de receptividad sexual y, por tanto, de apareamiento. Los genitales externos pueden mostrar un ligero enrojecimiento asociado al aumento de volumen de la vulva, pero no hay hemorragia.
Apareamiento: la gata, una vez finalizado el apareamiento, se da la vuelta y ataca al macho.
Esto ocurre porque el pene del macho está cubierto de espinas cortas y afiladas y, cuando se retrae, araña las paredes de la vagina de la hembra, provocándole un intenso dolor.
El fuerte dolor que siente la gata inicia el proceso de ovulación. Este mecanismo permite que los espermatozoides masculinos se encuentren con los ovocitos femeninos.
Interestro: representa un intervalo de inactividad sexual interpuesto entre picos de función folicular. Se caracteriza por bajas concentraciones de estrógenos y progesterona. Al final del interestro hay un nuevo proestro.
Diestrus: si la ovulación se produce durante el celo, sigue un periodo de diestrus. Si no se ha producido la fecundación, también puede producirse un pseudoembarazo. Si, por el contrario, el apareamiento fue fértil, tras la ovulación se producirá el embarazo propiamente dicho. Al diestrus, durante la época de cría, le sigue un nuevo proestro.
Anestro: es el periodo de reposo sexual. En esta fase, la gata es sexualmente inactiva y no receptiva.
EN QUÉ CONSISTE LA ESTERILIZACIÓN FELINA U OVARIECTOMÍA
El procedimiento de esterilización de las gatas se denomina ovariectomía y consiste en la extirpación de ambos ovarios y, en algunos casos, del útero y el cuello uterino.
La operación previene la aparición de enfermedades de los ovarios (quistes ováricos y neoplasias) y del útero (infecciones, hemorragias, roturas y neoplasias).
También se reduce notablemente el riesgo de contraer tumores mamarios, que suelen ser malignos en las gatas.
La esterilización de la gata reduce drásticamente su tendencia a vagabundear durante el periodo de celo y también conlleva una reducción considerable del comportamiento de marcaje urinario.
Al reducir la tendencia a aparearse, disminuye el riesgo de contraer enfermedades a menudo mortales como el
VIF
(virus de la inmunodeficiencia felina, que ataca al sistema inmunitario felino y compromete su eficacia) o el
VLF
(virus de la leucemia felina, que provoca una de las enfermedades más graves que pueden afectar a los gatos).
La transmisión de estos virus se produce por contacto sexual o por contacto con los fluidos corporales de gatos infectados.
En las gatas no suele haber riesgo (a diferencia de lo que ocurre con la esterilización de las perras) de encontrar problemas de incontinencia urinaria.
Siendo así, se entiende por qué las gatas esterilizadas tienen una existencia más larga y menos plagada de enfermedades que las que no se han sometido a la esterilización.
POST-ESTERILIZACIÓN DEL GATO Y DEL METABOLISMO: NO TENGA MIEDO, SÓLO HACE FALTA UN POCO DE ATENCIÓN
Una vez que la traigas a casa, déjala descansar en el transportín, preferiblemente en una habitación pequeña, con la caja de arena a su disposición y en total tranquilidad para que pueda reponerse de las secuelas de la anestesia.
Después de la cirugía, bajan las defensas inmunitarias, así que no exponga a su gatito al contacto con otros gatos potencialmente enfermos.
Un poco de hinchazón de la herida es evitable.
En parte se debe a la reacción de los puntos, en parte a los movimientos del gato y en parte a lamerse: la lengua de los gatos es áspera y el paso repetido sobre la herida (que, por supuesto, pica durante la cicatrización) provoca enrojecimiento e hinchazón.
Si tu gato se lame mucho la herida, como no puedes ponerle gasas o vendas en el abdomen porque se las arrancaría, puedes probar a ponerle un traje de bebé.
Y de nuevo, con la extirpación de los ovarios el metabolismo se ralentiza, pero con una dieta correcta y equilibrada puedes mantener el peso de tu gata bajo control y evitar que aumente de peso.
ESTERILIZACIÓN FARMACOLÓGICA
También existe la posibilidad de bloquear el celo de la gata por medios farmacológicos: esta técnica consiste en administrar fármacos progestágenos (compuestos con actividad similar a la progesterona) que anulan la acción de los estrógenos, responsables del celo.
Esta práctica es desaconsejable porque se ha demostrado que aumenta significativamente los riesgos de infecciones uterinas(piometra) y los de desarrollar tumores mamarios.
El personal de la Clínica La Veterinaria está a su disposición para visitas y consultas: póngase en contacto con nosotros para concertar una cita con los médicos veterinarios de nuestra plantilla.
Además, le recordamos que la Clínica La Veterinaria está siempre abierta las 24 horas del día, incluidos festivos, y dispone de un servicio de urgencias de 20 a 8 horas.
Por la alegría de verlos felices.
