La vuelta a la vida cotidiana tras las vacaciones es estresante para todos, pero lo es especialmente para nuestros amigos de cuatro patas.
Después de pasar días enteros de verano junto a sus humanos y realizando juntos muchas actividades nuevas y emocionantes, los perros se encuentran de repente solos en casa durante horas y horas, aburridos y deprimidos por volver a la vida cotidiana.
Las actitudes del perro que indican su estrés de retorno
La inhibición y la agitación son las actitudes más frecuentes y evidentes en el perro estresado.
El perro inhibido permanece quieto y aislado en un lugar de la casa como si esperara algo.
Por el contrario, el perro agitado manifiesta su malestar con llantos, aullidos o ladridos anormales.
También puede manifestar su malestar mediante micciones y defecaciones anormales en el hogar.
Perros deprimidos y aburridos. ¿Qué hacer?
Tu amigo de cuatro patas necesitará unos días para superar esta fase de ansiedad y estrés, pero mientras tanto, puedes facilitarle la vuelta a los viejos hábitos con algunos trucos.
En primer lugar, sería una buena idea mantener el buen hábito de dar largos paseos y dedicar el tiempo adecuado a jugar e interactuar con el perro, sin prisas y con entusiasmo.
Es cierto que los horarios de trabajo imponen ritmos ajustados, pero sacar tiempo para ti y tu amigo de cuatro patas debería ser una norma no sólo en vacaciones, sino durante todo el año.
Los juegos de masticar o los snacks de larga duración ayudan a reducir el estrés del perro, al igual que utilizar diferentes estrategias a la hora de alimentarle.
Utilice el kong o esconda su comida induciéndole a buscarla: estimular la búsqueda olfativa del perro reduce su estrés y le gratifica.
Y, sobre todo, no espere que todo vuelva a la normalidad en un chasquido de dedos.
Después de todo, si lo piensas bien, si el regreso del perro a casa es un poco problemático, tú eres el único culpable de haber alterado totalmente sus hábitos.
Puede evitar que su perro sufra estrés durante las vacaciones
Para facilitar un retorno sin sobresaltos, pueden adoptarse de antemano dos estrategias:
- evite pasar las 24 horas del día con su perro: en la vida cotidiana ya no podrá estar con él día y noche y esto puede desestabilizarle
- su zona de confort con su caseta y los juguetes con los que suele entretenerse cuando está solo en casa: el “kit de viaje” hará que el cambio y el posterior regreso sean menos traumáticos para él
- Mantenga la frecuencia y el ritmo de los paseos: un ritmo normal en su rutina diaria será propicio para un regreso tranquilo y sosegado
Pero, sobre todo, la primera regla que hay que poner en práctica también se aplica a nosotros, los humanos: evitar volver de vacaciones la tarde anterior a la vuelta a la oficina o al colegio.
Más bien, anticipe su regreso un par de días durante los cuales usted y su amigo de cuatro patas puedan reanudar los ritmos ordinarios a los que están acostumbrados sin impactos repentinos en la vida de la ciudad.
Si desea el asesoramiento de un veterinario experto en comportamiento animal, póngase en contacto con nuestros especialistas y reserve una cita.
También queremos recordarle que en caso de necesidad y urgencia Clínica La Veterinaria está siempre abierta las 24 horas del día, incluidos festivos, y con un servicio de urgencias de 20 a 8 horas.
Por la alegría de verlos FELICES